AMIGO, PASE Y PREGUNTE
D. JOSÉ, EL CURA, Y PACO, EL HERRERO.
Paco: Hola, D. José, me alegro verle, porque pensaba ir a su casa a consultarle un asunto.
D. José: Si no te importa podemos hablar aquí, sentados en un banco de la plaza.
Paco: No hay problema, porque quiero que me de una información de algo que no veo claro.
D. José: Pues tú me dirás qué es lo que no ves claro.
Paco: Un vecino del pueblo de al lado, Cabañas de la Sierra, vino a pedirme que le hiciera cien herraduras para venderlas en la feria de su pueblo, que son el próximo domingo. Y lo que me pareció raro es que me dijo que en su pueblo nadie tiene caballos. Entonces ¿para qué quiere las herraduras? Y pensé: voy a ver a D. José.
D. José: Me parece que ya sé para qué las quiere: para ponerlas detrás de la puerta de la casa, pensando que le dará suerte; pero eso es una tontería que se les ha ocurrido a la gente ignorante de los pueblos. Eso no sirve absolutamente para nada. Es sólo una de tantas supersticiones que hay.
Paco: Entonces, ¿Vd. cree que no sirven para nada? ¿Dios no les ayuda con eso? Algunos creen que sí.
D. José: Amigo Paco. Dios les ayuda siempre porque les ama como Padre, y tenemos la oración para pedirle que nos ayude; pero esa herradura, el número 13, el puño negro que se ponen en una cadena al cuello, y tantas tonterías más, ¡sólo son supersticiones de gente ignorante! ¿Tú has visto que el Evangelio habla de esas cosas? ¡Nada!
Oración y fe en Jesucristo que es el único Salvador.
Paco: Entonces, ¿Vd. me aconseja que no le haga las herraduras? Se puede enfadar conmigo ese hombre.
D. José: Tu trabajo es el de herrero y haces lo que te piden, porque vives de eso, lo mismo que si te piden que hagas un cuchillo o una reja; pero, como tú eres buena persona, si quieres aconsejarle bien, ya es problema de tu conciencia. No es fácil quitar las supersticiones de la cabeza de la gente ignorante.
Paco: Y, ¿me puede explicar qué es la superstición? Alguna vez lo he oído pero no sé qué quiere decir.
D. José: Superstición es creer en cosas que no enseña la fe cristiana. Las inventan
personas ignorantes y se extiende entre las gentes de los pueblos de poca cultura. Una joven que se quería casar dijo que casarse en Mayo era malo, que se lo habían dicho su abuela y su madre. ¿Por qué va a ser malo? Igual que en otro mes, y, además, Mayo es el mes de la Virgen. ¡Cosas de personas ignorantes! ¡Tonterías!
Paco: ¿Es lo mismo que beatas, gente que siempre está rezando y se ponen muchas medallas?
D. José: Despacio, amigo Paco. No confundas las cosas. Jesús nos aconsejó rezar siempre, y esos que rezan mucho obedecen el mandato de Jesús. Otra cosa es cómo rezan, para qué rezan y a quién rezan.
Paco: Una vecina mía reza todos los domingos para que el equipo de fútbol de su pueblo gane. ¿Vale? Yo le digo que pierde el tiempo, pero ella reza que reza.
D, José: Es mejor que rece por la paz del mundo, por los enfermos, por lo que han perdido la fe o no la tienen. Rezar por el fútbol es perder el tiempo. Hay que ser serios en las cosas de Dios, usando la cabeza y el corazón. Se gana metiendo goles pero no rezando.
Paco: Y,¿ponerse una cadena con una cruz o una medalla de la Virgen, puede ser superstición o puede ser devoción?
D. José: Sí y no. Si te pones una cruz como un testimonio de tu fe, o una medalla como signo de tu amor a la Virgen, está muy bien; pero si te la pones pensando que sólo por eso no te vas a enfermar nunca, o ir al cielo ¡sí es superstición! Sólo por llevar la medalla no se gana el cielo.
Paco: Ahora lo veo claro. Es importante hablar con Vd., recibir formación religiosa, porque la mayoría de mis amigos creen que hay Dios, van a Misa como costumbre…Falta mucha formación religiosa en la gente.
D. José: En eso estamos totalmente de acuerdo, y para eso pusimos las clases diarias de Formación permanente para adultos, pero casi nadie va. ¡No le interesa la cultura religiosa!
El sacristán.
